AVI ISSACHAROFF: “DESTRUCCIÓN Y MÁS DESTRUCCIÓN, SIN NINGUNA EXPECTATIVA”

Aclaración del traductor: la imagen del Estado Judío como empresa de demoliciones que se está consolidando en el mundo, y el judío tonto que todavía le cree a Netanyahu.  

Los entusiastas partidarios de Netanyahu siguen difundiendo historias e imaginaciones sobre cómo estamos a un paso de la "victoria total", mientras más soldados mueren y otros se quitan la vida debido a los horrores vividos.

AVI ISSACHAROFF

La Franja de Gaza se ha convertido en uno de los mayores sitios de demolición de bienes raíces del mundo, y las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) son las contratistas. En cada imagen que llega de Gaza, en cada reportaje televisivo, se revelan las dimensiones de este evento: una destrucción apocalíptica, de proporciones verdaderamente bíblicas, que se nos explica de forma diferente cada vez. A veces, el objetivo es "vencer a la brigada de Hamas en Khan Yunis", y otras, la necesidad de proteger la ruta que partió a Gaza en dos. A veces, es un pretexto comprensible para proteger a las fuerzas de las FDI, pero mientras tanto, los soldados y contratistas de las FDI (operadores civiles de equipos pesados de ingeniería) sufren daños durante las demoliciones. La semana pasada, por ejemplo, numerosos medios de comunicación israelíes informaron sobre el último y "dramático" acontecimiento en la guerra en la Franja de Gaza. Las FDI han trazado una nueva ruta que divide Khan Yunis en dos y se llamará "Magen Oz". Según informes, esta nueva ruta que llega hasta la ruta Morag, supuestamente conducirá a la derrota de la brigada de Hamás en Khan Yunis, una brigada que, en el pasado, ya anunciaron que ha sido derrotada y cuyos comandantes han sido eliminados. Ayer se informó que las fuerzas están destruyendo edificios a lo largo de toda la ruta para protegerla, y estamos hablando de cientos de edificios.

Y esta es, resumiendo, la esencia de los combates, tal como los vemos sobre el terreno estos días. Es cierto que se están descubriendo más túneles y se está abatiendo a más terroristas, pero lamentablemente esta guerra no tiene un objetivo real. Los combates sobre el terreno a menudo se libran sin un enemigo en mente, incluso sin población alrededor. Simplemente se trata de una destrucción masiva de bienes inmuebles que probablemente no ayudará a deshacerse de Hamás, pero que huele a venganza. La destrucción se ha convertido en un objetivo en sí mismo, cuyo propósito no está claro, a menos que alguien quiera impedir el regreso de los palestinos a toda la Franja de Gaza.

Lamentablemente, esta masiva actividad de ingeniería no acelerará la liberación de rehenes ni impulsará una solución en Gaza similar a la de "demoler Hamás". Alguien confundió la demolición de edificios, barrios y pueblos con el desmantelamiento de la organización. Los entusiastas partidarios de Netanyahu siguen vendiendo historias e inventos de que estamos a un paso de la "victoria total”, quién sabe cuántas veces. Otro barrio de Gaza en ruinas, otra ciudad destruida, otra bomba. Informes de daños a altos funcionarios de Hamás, yihadistas de alto rango, nombres que pocos en Israel conocen; es dudoso que incluso los líderes de Hamás en el extranjero sepan de quién están hablando.

Y mientras tanto, más soldados de las FDI mueren. Y más soldados se quitan la vida por los horrores que han visto, por las experiencias que han tenido. La mayoría de los ciudadanos de este país observan lo que está sucediendo en Gaza y se preguntan: ¿para qué? ¿Por qué este gobierno y su líder se niegan a un acuerdo integral sobre rehenes? Cada vez más madres y padres cuyos hijos prestan servicio en Gaza tienen dificultades para creer que su hijo o hija vuelva a entrar en la Franja, para una nueva ronda sin otro propósito que la destrucción de hogares y barrios. ¿De verdad alguien piensa que en cualquier momento los pocos funcionarios de Hamás que aún siguen vivos ondearán banderas blancas y saldrán de los túneles con las manos en alto? Hamás no ondea bandera blanca, ni lo hará.

Para Hamas, nada cambia ante más barrios destruidos en Gaza; tampoco le importa que Israel establezca una ciudad humanitaria en Rafah. Esto solo aumentará la angustia en la Franja, más niños y mujeres de Gaza sufrirán y morirán. Esto solo beneficia las relaciones públicas de Hamas y solo aumenta el odio hacia Israel en todo el mundo. Para Hamás, si Israel también destruye sistemáticamente barrios en la ciudad de Gaza (algo que Israel se ha abstenido de hacer hasta ahora), solo beneficiará a la organización a largo plazo. Más niños de Gaza se unirán a Hamás y querrán luchar contra los israelíes; más desesperación en la Franja solo le dará esperanza. Ya están construyendo el futuro de la organización durante décadas sobre las ruinas de Gaza.

¿Qué hacer entonces? Después de todo, cuando el gobierno de Netanyahu intentó convertir a Hamás en un factor de beneficio, cuando permitió que la organización creciera y se desarrollara, ellos se prepararon para la masacre del 7 de octubre. ¿Y ahora qué? Si detenemos la guerra contra Hamás, empezarán a prepararse para el "próximo 7 de octubre". Pero se suponía que este gobierno debía preparar un plan para el "día después". En cuanto comenzó la guerra en Gaza, todos, con ojos en la cabeza, rogaron al gobierno y a su líder que prepararan una alternativa al gobierno de Hamás, que se prepararan para el "día después". Pero esta coalición estaba ocupada aprobando leyes golpistas y leyes de evasión del servicio militar. Mientras nuestros hijos luchan, resultan heridos, mueren y se quitan la vida, este gobierno ha estado involucrado en maniobras que impedirán elecciones anticipadas y se mantendrán en el trono del poder para siempre. Si Israel quiere poner fin a esta guerra algún día, tendrá que esforzarse por alcanzar un acuerdo con los países árabes y la Autoridad Palestina que conduzca a la salida de Hamás del poder en Gaza y a su desarme. Dicho acuerdo podría estar sobre la mesa si Israel presiona, pero es dudoso que este gobierno lo desee. Solo sigue culpando al ejército, a los medios de comunicación y a la oposición, todos ellos culpables de revolcarse en el fango de Gaza, además de las políticas fallidas de este gobierno.

Al final, incluso el gobierno de Netanyahu tendrá que hacerlo, ya que el pueblo que sirve, paga impuestos y es leal al Estado y no a su líder, no lo tolerará por mucho más tiempo y no aceptará que esta guerra continúe indefinidamente.

Avi Issacharoff: Periodista, escritor y creador de la serie Fauda.

Fuente: Ynet, 21-7-25

Traducción: Daniel Kupervaser

Herzlya – Israel 21-7-2025

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