CAROLINA LANDSMANN: “EN LA CAMPAÑA DE VENGANZA EN GAZA, ISRAEL SE CAVA SU PROPIA TUMBA”
El césped de las canchas de fútbol de la Copa Europea
nunca ha estado tan verde como este año. Qué divertido es ser normal. Vivir en
un continente normal, en un país normal, vivir una vida simple disfrutando de normalidad.
Diversión para jóvenes de Europa, que viven en un mundo que tiene tres tiempos:
pasado, presente y futuro. No como aquí, en Israel. Aquí sólo hay un tiempo
dominante y poderoso: un pasado que no pasa, que castra el presente, asesina el
futuro y lo hereda, y repite, y otra vuelta.
En los últimos meses, gente de todas partes habla
abiertamente de irse. Noté que no usan el término común en hebreo
"bajarse", sino irse. Quizás porque cuando un israelí “se baja”, Israel
permanece intacto, mientras que ahora la sensación es que la casa está en
llamas y se ven obligados a abandonarla antes de que se derrumbe sobre sus
ocupantes. Los niños deben ser rescatados para enviarlos afuera antes de que
sea demasiado tarde. ¿Cuándo sabes que es hora de partir? ¿Y qué hace alguien
que no sabe o no puede irse?
En el discurso histórico que el presidente
estadounidense Joe Biden pronunció ante la nación israelí cuatro días después
de la masacre del 7 de octubre, describió su reunión con la primera ministra
Golda Meir semanas antes de la guerra de Yom Kippur.
Aunque Biden ya había contado esta historia más de una
vez, esta vez la historia estaba llena de una especie de vitalidad renovada,
como si se reuniera con las circunstancias de su nacimiento: la amenaza
existencial. Una amenaza del tipo que hace que muchos contemplen alternativas a
una vida en la que no existe el Estado de Israel (como si sin él no tuviéramos
adónde ir).
Pero Biden -es importante recordarlo- no contó la
historia para ponernos en un modo de amenaza existencial, sino exactamente lo
contrario: para que no caigamos en ella. Para que no sintamos que estamos ante
un peligro existencial, ciertamente no solos. Para que no actuemos por miedo
colectivo a la muerte y que no reaccionemos por deseo de venganza. Biden
intentó calmarnos, disipar el miedo.
Israel no escuchó a Biden. Se rindió por completo a su
miedo existencial y se embarcó en un viaje de venganza que hasta ahora dura
nueve meses y se cobró la vida de decenas de miles de palestinos, la mayoría de
los cuales inocentes.
“Antes de empezar un viaje de
venganza, cava dos tumbas”, advirtió Confucio, e Israel, con locura, estuvo de
acuerdo. Cavó dos tumbas antes de emprender su viaje: una para el enemigo y
otra para los rehenes, a quienes abandonó a su muerte.
Pero no sólo a los rehenes abandonó. La campaña de
venganza que ha emprendido Israel le lleva directamente al peligro existencial
que él mismo produce con su comportamiento demencial. Día a día la situación de
seguridad empeora, el aislamiento internacional aumenta y las amenazas crecen.
Por no hablar de las decenas de miles de huérfanos palestinos que Israel empujó
al círculo de la venganza. Israel cava su propia tumba y arrastra consigo a los
judíos de la diáspora.
La locura no conoce límites: “arrasar Gaza”; "El
centro de Beirut se parecerá al centro de Gaza"; “atacar a Irán”; “calcinar
Cisjordania”; “apoderarse del corredor Filadelfia y despreciar a los egipcios”;
“subestimar a los jordanos”; “ser grosero con los americanos”; “burlarse de la
ONU y del tribunal de La Haya”. Vivamos solos en Dimona (hace referencia a
sitio donde según versiones extrajeras, Israel dispone de bombas atómicas. DK)
Y como la victoria que lo calmaría no puede lograrse
(basta una mirada rápida al mapa de Medio Oriente para comprenderlo), Israel
sólo arribará a una derrota. Una derrota aplastante, dolorosa, brutal. Hasta
entonces mataremos, reventaremos, bombardearemos, aniquilaremos, frustraremos ataques
de terror, aplastaremos, haremos colapsar. ¿Quién nos detiene?
Carolina Landsmann, periodista del diario Haaretz
Fuente: Haaretz, 28-6-24
Información complementaria del traductor
Según un informe de Tani Goldshtein, 500 mil israelíes
abandonaron el país en los primeros 6 meses de la guerra (en hebreo) https://www.zman.co.il/497308/popup/
Traducción: Daniel Kupervaser
Herzlya – Israel 28-6-2024
kupervaser.daniel@gmail.com
https://ojalameequivoque.blogspot.com/
@KupervaserD
Lástima que esta descripción de la realidad sea compartida por una minoría
ResponderBorrarMil gracias Carolina por tu labor. Mi mayor respeto, extensivo a los compañeros de Haaretz, por informar críticamente y desenmascarar la narrativa del régimen sionista.
ResponderBorrar