SHARON NOS SACÓ DE GAZA, PARECE QUE NETANYAHU NOS LLEVA DE VUELTA

Me sentí optimista cuando escuché las primeras declaraciones de Netanyahu en oportunidad que delineó el orden previsto en Gaza al final del operativo israelí. En mi criterio, la combinación de 3 aspectos básicos de la estructura operacional futura de Gaza, tal como en un principio salieron de boca de Netanyahu y Biden - control de seguridad israelí, sin colonias civiles judías y admiración civil palestina propia - sería capaz de crear un marco de expectativas positivas respecto de un prometedor futuro, aunque no muy cercano, de solución del conflicto palestino israelí (“El fin de la guerra en Gaza podría apuntar a una salida pacífica del conflicto palestino-israelí”, 7-11-23).

Me equivoqué. No en el aspecto conceptual, sino en interpretar erróneamente las intenciones del primer ministro israelí.

En otra nota referida al tema, a principios de la guerra, señalé que Netanyahu e Israel tienen probabilidad de materializar satisfactoriamente sus tres objetivos declarados cuando se lanzó al ataque en Gaza: derrocar a Hamas, liberar los rehenes israelíes y garantizar la seguridad futura de Israel en el límite con Gaza (“Derrocar a Hamas. ¿Y al otro día qué hacemos?”, 14-10-2023). Esta afirmación fue acompañada de varias contrariedades que podrían surgir y frenar o poner límites al operativo: prolongación en el tiempo con el enorme costo económico y social que implica, insoportable número de soldados caídos, peligro de vida para los rehenes, presiones internacionales de alto de fuego, especialmente por parte de EE.UU. A todo esto, se le agregó un enorme interrogante: ¿Cómo y con quién implementar esos 3 aspectos básicos del futuro de Gaza el día después que Hamas fuera derrocado?

Tras más de 75 días de combates, hoy el horizonte de los planes de Netanyahu comienza a complicarse dado que las contrariedades mencionadas comenzaron a pasar factura a Israel.

Tanto Galant, ministro de defensa de Israel, como otros componentes del Gabinete de Guerra de Israel, afirmaron que esta escalada bélica, a diferencia de operativos del pasado, no se trata de una guerra relámpago de días o semanas, sino que se habla de meses, año, y tal vez más. El numero de bajas en el frente no deja de crecer día a día, a lo que se sumó el trágico incidente por el cual soldados israelíes se confundieron y acribillaron a balazos a tres rehenes israelíes en su intento de fuga.


General Halevy a Netanyahu: la guerra nos va a llevar por lo menos un año. Netanyahu: Finalmente una buena noticia

Paralelamente, la opinión pública internacional cada día se torna más y más antagónica a Israel, mientras que EE.UU., el gran respaldo de Israel en esta arena, ya da muestras de incomodidad presionando por un drástico cambio que lleve a Israel a continuar su propósito de aniquilar a Hamas, pero reduciendo significativamente la intensidad de sus ataques.

No menos llamativo es el desarrollo de los acontecimientos alrededor de la temática de la administración civil futura en Gaza en manos palestinas el día que Hamas sea derrocado. Tanto para Biden, como para lideres de países árabes amigos de Israel, este casillero está destinado única y exclusivamente a una Autoridad Palestina “revitalizada” en el marco de negociaciones basadas en la solución de dos estados. Sin esperar un minuto, Netanyahu descalificó de plano a la Autoridad Palestina agregando que él no va a permitir progresar ni un milímetro a la solución de dos estados.

Paradójicamente, al mismo tiempo que los objetivos originarios que Netanyahu impuso al operativo contra Hamas parecen alejarse en el tiempo y desdibujarse en su contenido, el primer ministro de Israel no baja su tono altanero. Al mismo tiempo que rechazaba toda participación de Mahmoud Abbas, afirmaba a viva voz: “nosotros continuamos con la guerra hasta el final. La guerra continuará hasta la aniquilación de Hamas, hasta la victoria” (Twitter Netanyahu 20-12-23).

Hoy ya es imposible desentenderse del aluvión de informes de analistas de seguridad de primera línea de Israel que ponen en duda la posibilidad que Netanyahu logre su objetivo, e inclusive ya hablan de fracaso. Esto ya lo mencionó Eran Etzion, ex subdirector de la Agencia de Seguridad de Israel, en su nota de días atrás traducida en este mismo blog “La guerra intensiva en Gaza se termina en muy pocas semanas”.

El veterano y reconocido periodista Najum Barnea sostiene que: Habrá desilusión. Los objetivos que el nivel político impuso al ejército eran inalcanzables. Estaba claro para todos, desde el primer día: la eliminación, el exterminio, la destrucción, son fantasías cuando se trata del tipo de golpe que sufrimos el 7 de octubre. Pero las fantasías no pueden ser plan militar, ni una estrategia. Las expectativas excesivas generan decepción” (“Parece que el ejército de Israel pronto reducirá su accionar en Gaza”, Ynet, 21-12-23).

Ronen Bergman, el analista israelí de reconocido renombre internacional afirma que: “Nadie todavía quiere admitir que es imposible liberar a los secuestrados y eliminar a Hamás. Ningún jerarca israelí está dispuesto a reconocerlo públicamente, pero esta es la realidad.” (Ynet, 21-12-23)

Pero como lo menciona Zvi Barel, otro reconocido analista, no solo Netanyahu fracasa en sus objetivos, da la impresión que nos deja una incómoda herencia en Gaza. Ante su negativa aceptar la participación de la Autoridad Palestina en el manejo de la administración civil en Gaza al final de la guerra, junto con la negativa de otros países árabes de acoplarse en esa misión en territorio bajo control militar israelí, “Netanyahu conduce a Israel hacia una reconquista directa y total de Gaza” (Haaretz, 18-3-23)

Justamente otro renombrado analista militar, Amos Harel, se encarga de advertirnos de ciertos preparativos en el ejército que ya testimonian ese proyecto de dominio territorial. El rabinato del ejército de Israel ya prepara los próximos festejos de Pesaj para los soldados en Gaza (abril 2024), mientras el grupo de esparcimiento del comando sur del ejercito ya ensaya una nueva canción titulada: “Navidades en Gaza” (Haaretz, 18-12-23). Tampoco las iniciativas privadas están exentas de esta aventura. Ya se proponen proyectos de construcción de viviendas para judíos en las “hermosas playas de Gaza”.


Iniciativa privada israelí: el sueño de una casa en playas de Gaza


Sharon nos sacó de Gaza, parece que Netanyahu nos lleva de vuelta.

Ojalá me equivoque.

Daniel Kupervaser

Herzlya – Israel 22-12-2023

kupervaser.daniel@gmail.com

https://ojalameequivoque.blogspot.com/

@KupervaserD   

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